La literatura tiene presente el arte, siendo frecuente que la literatura suele convertir la realidad que está alrededor y llega a aporta una sensación placentera y atractiva, aunque en ocasiones también puede crear angustia y desasosiego.
Estas cualidades están sobrentendidas en cualquier otra expresión de representación artística.
Una de las limitaciones que no comparte la literatura con otras expresiones artísticas es el medio, lo que la ubica en un plano de desfavorable frente a otras obras de arte que se encuentran libres de esas limitaciones.
Por eso normalmente la literatura representa parte del arte, es la expresión humana por medio de la palabra escrita.

La capacidad lógica alcanza la inteligencia reflexiva, y la parte del sentimentalismo te trasportan hasta los más agudos efectos sensoriales.
De igual manera ocurre cuando observar una pintura, se escucha una pieza musical, una escultura o se presencia obras de teatro.
El arte se formula mediante diversas expresiones y es por medio de la literatura y su persistencia en el tiempo, donde se puede sentir reconocimientos con otras eras a partir de la palabra auténtica e impresa en un libro.
En la actualidad esto está cambiando, la palabra pierde sentido cuando están otros canales por el cual se puede transmitir la palabra escrita.
Aún almacenando los libros de forma digital, aunque hayan bancos de información, jamás será igual.
El respeto y la emoción que propaga el hecho de estar en una biblioteca y sentir el silencio, la esencia de las historias que allí descansan, la vida de cada volumen y los secretos que encierran, eso no se puede suplantar.
Poder establecer parte de un entrenamiento literario, bien sea escribiendo una novela o un poema, así como cualquier otro modelo literario te acerca a una de las manera de expresión artística más confusas que existen.